DE LOS CENTROS DE LAS CIUDADES A LOS BARRIOS.

Más allá de las grandes convocatorias nacionales o internacionales, de las acciones puntuales que, en cada lugar, se puedan llevar a cabo; más allá de buscar alternativas globales a los problemas globales que nos rodean; el 15M debe de seguir profundizando en su trabajo cotidiano de barrio, en el acercamiento a los problemas concretos de los vecinos, en la presencia pública de apoyo activo a los colectivos que en los diferentes barrios trabajan por una sociedad más participativa y democrática desde antes que el 15M existiera.

Y esto por una cuestión de estrategia a corto y medio plazo. Queda aún mucha gente por indignarse, sigue habiendo aún muchos prejuicios acerca de este movimiento que nació el 15 de mayo de 2011 y que son necesarios desterrar de ese imaginario colectivo que algunos medios se han encargado de divulgar.

Porque el 15M tendrá futuro, no sólo por sus reclamaciones y denuncias, sino también por su trabajo a pie de calle junto a los vecinos que aún no se han movilizado con nosotros. Llegan noticias de algunas asambleas de barrio que se han desinflado y es urgente dar contenido a esos espacios que conforman el núcleo central del movimiento. O nos acercamos al entorno inmediato de cada uno de nosotros o la difusión y el desarrollo quedarán a merced de los grandes medios. Elaborar y poner en práctica proyectos de barrio es, para mí, algo no sólo necesario, sino imprescindible. 

Es un trabajo paciente, al principio puede ser muy arduo, poco vistoso; es un trabajo de constancia, de planificación, de elaboración y de puesta en práctica. Pero será un trabajo fructífero en el tiempo, nos dará cimientos duraderos y devendrá en una participación no sólo puntual sino también estable.

Es un trabajo también de moderación, de evitar radicalismos que asusten, de poner en valor nuestra independencia de partidos, organizaciones u otras. Es un trabajo de difusión y concienciación colectiva, de educación también en los modos y maneras asamblearios y democráticos. Se trata de hacernos ver y de mirar. La encarnación del 15M en los barrios no puede ser tema menor, al contrario, debería de ser tema prioritario.

En próximas entradas trataré de ser algo más concreto.